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Comparte tu sentir, si estás bien y eres feliz elevas tu vibración y contribuyes a fluir. Si tienes dudas déjalo salir, siempre hay un amigo que te hace sonreír.

Estés como estés lo puedes decir, a aquél que sabe escuchar y el respeto es su sentir. Porque el verdadero amigo, comprende tus pensamientos y si sabe observar, ve cuando tienes miedo; cuando te has preocupado, cuando te sientes violento, cuando estás atascado y cuando vives el cielo.

Cuando compartes te abres a ver algo más de ti, porque al decirlo al otro desbloqueas tu sentir.

Desde ese punto importante donde el corazón escucha, se caen los juicios de valor, se van serenando las luchas, se deshace la prisión, se limpia toda excusa y hay una renovación donde la energía es más segura.

En la intención está la entrega para disolver las penumbras. También el amigo descubre que dejas de estar a oscuras, cuando al mirarle a los ojos es a ti que te regulas.

Siempre hay un mensajero conectado a tu vida, porque nada hay separado, aunque tu mente lo diga y todo habla de ti, es la Magia de la Vida.

Hay un nuevo amanecer en la visión de la vida, nada es como lo crees, el Amor es la medida, han de caerse las vendas y los velos que limitan, todas las posibilidades que están en la Vida misma, por eso están en ti, esa Unidad infinita.

 

Recuerda: Aprende a quererte y a amarte como eres, pues eres un ser perfecto en tu interior se contiene toda la savia y la vida y esa chispa perenne.

Y aquello que ves de ti en su forma exterior, nada has de corregir porque nada es error. Es la vida que has tomado y es desde el Amor. Es tu instrumento sagrado, es vehículo de Dios. Amalo, respétalo, dale caricias y bendícelo, porque es un cuerpo perfecto, aunque parezca que no. Está hablando de ti y es así de inspirador, acepta aquello que ves, pues es de ti lo mejor, al aceptarlo integras y se va la negación, sin ningún desequilibrio pues se despierta tu don. Saber que el cuerpo se ha formado con toda la información y corresponde a tu vida y a tu experimentación. Según quieres vivenciar se expresa en ti un motor y el vehículo que necesitas para esa tu función, es tu traje y se adapta, míralo con compasión y al mirarte al espejo verás que estás viendo a Dios.

 

Rosamari Ramírez del Cerro

 

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